Lo que más aprecio de Swiss HRmed es el apoyo personal, amable y basado en la confianza. El hecho de que Brigit conozca tanto nuestra profesión como nuestra clínica por experiencia propia marca la diferencia para mí.
Bettina

Estudié farmacia en mi país de origen y trabajé allí unos 3 años, luego trabajé como farmacéutica en Suecia durante dos años y ahora, desde hace poco más de un año, trabajo en Suiza.
Actualmente vivo en Greifensee, un precioso pueblecito del cantón de Zúrich. Aquí disfruto de la tranquilidad de la naturaleza y del lago. Al mismo tiempo, también disfruto de las ventajas de una gran ciudad como Zúrich.
Estudié Farmacia en España, que es un programa de 5 años (300 créditos ECTS), que incluye 6 meses de prácticas en una farmacia. Durante este tiempo, el estudiante pone en práctica lo que ha aprendido y aplica sus conocimientos a su trabajo diario.
Como ya he mencionado, he trabajado como farmacéutico en 3 países diferentes.
En España se trabaja mucho y muy duro. Hay muchas normas, pero la mayoría de ellas no se ven con tanta estrechez de miras y se interpretan en sentido amplio. Por eso, en mi profesión, a veces hay mucha inseguridad jurídica en España.
En Suecia casi nadie trabaja 100 %, la mayoría están empleados en la farmacia con 40 - 60 %. Hay muchas normas y se cumplen al pie de la letra. El trabajo de un farmacéutico es muy parecido al de un vendedor. Atiendes a la gente todo el día, el sistema lo hace todo automáticamente y los conocimientos del farmacéutico casi nunca son relevantes.
Suiza está a medio camino entre España y Suecia. Los suizos trabajan mucho, aunque muchos no sean empleados 100 %. Hay normas que casi siempre se cumplen, pero los suizos son pragmáticos y entienden que la salud del paciente es lo primero y que hay situaciones especiales que requieren excepciones. Un sistema así protege al farmacéutico, pero también al paciente. Suiza combina lo mejor de ambos mundos.
Creo que en España somos muy abiertos y sociales. En una profesión como la farmacia, en la que tienes que tratar con cientos de personas a lo largo de una semana, creo que es esencial tener buenas habilidades sociales.
Sé por experiencia que encontrar trabajo en el extranjero no es tarea fácil. Y todo el proceso que conlleva empezar una nueva vida en otro país es aún menos sencillo: mudarse, convalidar títulos, abrir cuentas bancarias, contratar un seguro médico, empadronarse, etc.
Como extranjero estás en desventaja, no conoces las reglas del país y la información es limitada. Aquí es donde Swiss HRmed demostró ser indispensable. No sólo me ayudaron (y con gran éxito) a encontrar un nuevo trabajo en Suiza. Han ido mucho más allá de su deber: Siempre estuvieron ahí para apoyarme y ayudarme cuando lo necesité, para decirme por dónde debía seguir y darme una hoja de ruta. O para ponerme en contacto con personas importantes, por ejemplo para los seguros. Estoy muy agradecido al equipo suizo de HRmed y a Brigit Friedrich en particular.
Es una experiencia muy enriquecedora trasladarse al extranjero y empezar una vida en otro país. Es un reto que te lleva al límite, pero muy gratificante.
Descubres de lo que eres capaz, empiezas a pensar con originalidad y te sales de la mentalidad dominante en tu país de origen. Aprendes otras formas de trabajar, otra ética del trabajo, otra cultura, otra forma de ver la vida y de afrontar los problemas.
En una situación así, es imposible no crecer como persona. Me gustan especialmente los suizos: no sé si se dan cuenta, pero probablemente sean las personas más educadas de Europa. Su serenidad: me encanta cómo afrontan los problemas con absoluta calma, sin perder los nervios. Su capacidad de trabajo: son muy trabajadores.
Como ya he mencionado, los suizos son extremadamente amables y educados. Desde el principio, siempre me sentí apoyado por mi jefe, mis compañeros e incluso los clientes.
No me suelen gustar este tipo de preguntas;) La vida me ha enseñado que es imprevisible, que suele ofrecer oportunidades a quienes las buscan y que el futuro es difícil de planificar.
Creo estar absolutamente segura de una cosa, y es que mi futuro está en Suiza. Soy una persona ambiciosa. Y mi motivación es perseguir nuevas metas que me saquen de mi zona de confort. Después de un año viviendo y trabajando en Suiza, puedo decir que estoy en el lugar adecuado, tanto profesional como personalmente.
Lo que más aprecio de Swiss HRmed es el apoyo personal, amable y basado en la confianza. El hecho de que Brigit conozca tanto nuestra profesión como nuestra clínica por experiencia propia marca la diferencia para mí.
Estaba muy preocupada por cómo empezaría mi vida aquí en Suiza, pero debo decir sinceramente que recibí una acogida muy cálida por parte de todos. En primer lugar, por Swiss HRmed, que realmente me dio una sensación de seguridad.
En una reunión personal con Brigit Friedrich, de Swiss HRmed, me informaron muy bien sobre lo que esto significa y lo que hace falta para trasladarse a Suiza.