Trabajar en un país tan multicultural permite conocer distintas naciones: sus lenguas, mentalidades y formas de comunicarse. Es muy inspirador.
Magdalena

Nací en Albania y luego me trasladé a Grecia, donde he vivido toda mi vida. Así que soy mitad albanesa y mitad griega.
En 2015, me trasladé a Alemania con mi marido, donde completé mi formación y tuve a mis dos hijos. Después de ocho años, nos trasladamos a Suiza y desde entonces trabajo en neurocirugía IMC en un gran hospital de Zúrich. Hablo alemán, inglés, griego, albanés y un poco de italiano.
Terminé mi formación como asistente sanitaria y de enfermería en Alemania en 2020.
En Grecia, cursé y completé el programa de formación para auxiliares contables. Cuando me trasladé a Alemania, decidí reciclarme como auxiliar sanitaria y de enfermería.
Me resulta difícil responder a esta pregunta, ya que sólo adquirí mi formación y experiencia laboral después de trasladarme de mi país de origen.
Soy una persona muy abierta y me llevo muy bien con todas las nacionalidades y religiones, lo que me ayuda mucho a apreciar a los pacientes y a la gente en general en mi campo de trabajo, pero también en mi vida, y a verlos como personas sin discriminación.
Soy una persona muy simpática y alegre, por lo que creo un ambiente agradable en el equipo y con los pacientes que están pasando por un momento difícil, y quizás lo más importante: ¡me encanta mi trabajo!
Swiss HRmed me dio la oportunidad de desarrollarme como enfermera en un país donde el sistema es mucho mejor y donde puedes desarrollarte profesional y personalmente y no quedarte parada. Incluso me dio la oportunidad de dar a mi familia una vida en la que se sienten seguros y reconocidos.
Al trabajar en una zona (IMC) y un país desconocidos, pude aprender mucho y me asignaron tareas que también eran nuevas para mí, como la gestión de turnos. También me dio la oportunidad de seguir desarrollándome profesionalmente.
Estaba muy preocupada por cómo empezaría mi vida aquí, pero debo decir sinceramente que recibí una acogida muy cálida por parte de todos. En primer lugar por Brigit, que realmente me hizo sentir segura, y Swiss HRmed en general me acompañó muy de cerca y muy personalmente en todos mis pasos, por lo que estoy muy agradecida.
Mis compañeros de trabajo también fueron muy acogedores y siempre me apoyaron, especialmente con mi miedo al alemán de Suiza. Todos fueron muy comprensivos, pacientes, extremadamente serviciales y educados.
En 2025 empezaré el curso de formación especializada IMC, tras el cual me gustaría seguir formándome y seguir desarrollándome en el sector sanitario.
Trabajar en un país tan multicultural permite conocer distintas naciones: sus lenguas, mentalidades y formas de comunicarse. Es muy inspirador.
Sin Brigit, probablemente seguiría en el mismo lugar. Me ayudó a obtener el reconocimiento de mi título y también a encontrar un nuevo trabajo como especialista en enfermería.
Lo que más aprecio de Swiss HRmed es el apoyo personal, amable y basado en la confianza. El hecho de que Brigit conozca tanto nuestra profesión como nuestra clínica por experiencia propia marca la diferencia para mí.